RUBÉOLA

Es una enfermedad infecciosa causada por el virus de la rubéola, un virus de ARN perteneciente al género Rubivirus de la familia Togaviridae. 

El virus es trasmitido por vía respiratoria y se replica la nasofaringe y en los nódulos linfáticos aparece en la sangre a los 5 o 7 días después del contagio y se dispersa  en todo el cuerpo. Se trasmite a través de estornudos, tos o superficies contaminadas (pañuelos, vasos o manos). 

Periodo de incubación suele oscilar entre 2 o 3 semanas, se puede transmitir la enfermedad a otras personas dos días antes de que los síntomas se muestren, no desaparecieron el riesgo de contagio hasta una semana después de la aparición de los signos de la enfermedad.

Se caracteriza por la aparición de pequeñas erupciones en la piel de un color rosáceo que inician en la cabeza y progresan a los pies, aparecen uno o días después del contagio con síntomas incluyen: 

• Fiebre (poco intensa)
• Malestar General
• Enrojecimiento de ojos
• Dolor de garganta
• Inflamación dolorosa de ganglios 
• Piel reseca
• Congestión nasal
• Dolor e inflamación articular
• Pérdida de apetito 
• Dolor de cabeza
• Manchas de Forchheimer ( manchas en el paladar)

DIAGNOSTICO

• Análisis en sangre (serología) 
• Pruebas especificas IgM y IgG
• PCR (Reacción en cadena polimerasa)

TRATAMIENTO: No existe un tratamiento en especifico, se centra en el control de los síntomas a mitigar la fiebre, el malestar general. Se recomienda reposa y aislamiento, normalmente los síntomas son tratados con paracetamol.

 RUBÉOLA CONGÉNITA

Los problemas graves suelen presentarse en mujeres embarazadas en las primeras 20 semanas, en este caso existe un alto riesgo de que el embrión se contagie y desarrolle el ¨Sindrome de la rubéola congénita¨ pueden padecer:

• Defectos de la audición
• Defectos oculares
• Defectos cardíacos
• Diabetes Mellitus
• Disfunción tiroidea
• Bajo peso al nacer
• Diarrea
• Meningitis

PREVENCIÓN: Las vacunas contra la rubéola están disponible en preparaciones monovalentes (vacunas dirigidas solo a a un patógeno) o, más frecuentemente, en combinación con otras vacunas, como las vacunas combinadas contra el sarampión y la rubéola, contra el sarampión, la parotiditis y la rubéola o contra la rubéola, el sarampión, la parotiditis y la varicela.

Es una vacuna combinada recomendada en la niñez. Es aconsejable administrar la primera dosis cuando el niño cumple 15 meses, la inmunización es a los 12 meses, la segunda dosis antes de la escolarización (entre los 4 o 6 años) o antes de la adolescencia (entre los 11 y los 13 años). En cualquier caso, también se recomienda la vacunación en personas adultas que no recibieron la inmunización durante la infancia.